A

cabo de terminar el capítulo Luces de la ciudad en su casi primera versión. Lo había abandonado estos días. Ya está. No era para tanto. Creo que me estaba dando miedo. El típico miedo de no saber si se sabrá. Bueno, cuando tengo una primera versión siempre me parece que ya no falta nada. Pero falta casi todo.  De todas formas, terminar este capítulo después de todo un día de trabajos otros es un logro (y éso que me duelen los oídos y últimamente me canso). Je suis hereuse, ja.

Cartel 1931:

Conviene recordarlo. Al menos para buscarlo de nuevo en su momento.